Primero que nada: para poder emulsionar una pantalla debemos asegurarnos de que tenemos una lugar cómodo, limpio y obscuro para trabajar, ya que es vital para la correcta aplicación de la emulsión.

Para hacerlo necesitamos:

• Emulsión
• Raedera (O cualquier objeto que sirva para extender la emulsión)
• Luz Amarilla

1er paso

Tenemos que asegurarnos de que nuestra pantalla este completamente limpia, sin polvo, restos de tinta ni de emulsión. En caso de que haya, debemos limpiarla con un desengrasante hasta asegurarse de que está completamente limpia.

2do paso

Apagar todas las luces e iluminar solamente con luz amarilla, ya que esta es la luz sana de la emulsión y no dañara la misma.

3er paso

Sujetando la pantalla a un ángulo de 45° vertimos suficiente emulsión usando la raedera y la extendemos hasta que no haya ninguna imperfección (especialmente gotas), en cuanto más lisa quede mejor va a salir. Con 1-2 capas de cada lado debería de ser suficiente.

4to paso

Después de ser aplicada se tiene que secar. Se recomienda que se guarde en un cajón obscuro y se deje reposar al menos unas 9 horas. En caso de que quieras acelerar el proceso, puedes usar una secadora de cabello y en unos 5 minutos la emulsión estará seca y lista para la exposición.

Nota: Existen diferentes tipos de emulsiones y puede que alguna requiera una preparación previa.